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Revolución en la Conducción Autónoma: La Estrategia de BYD para Democratizar la Tecnología a un Precio Asequible

abril 20, 2025

En un momento en que los precios de los coches eléctricos en Europa han aumentado debido a las estrictas normativas que requieren incluir asistentes de conducción avanzados, China está dando un paso audaz para democratizar la tecnología de conducción autónoma. La clave de esta revolución está en BYD, el mayor fabricante mundial de vehículos enchufables, que ha anunciado que equipará su sistema de conducción autónoma denominado «El Ojo de Dios» en todos sus modelos, incluso en los más asequibles, como el Seagull. Este coche eléctrico, que en China se vende por menos de 10.000 euros, podría llegar pronto a Europa, desafiando el mercado automotriz tradicional.

La Estrategia China: Tecnología Avanzada a Bajo Coste

Mientras que en Europa la incorporación de sistemas avanzados de asistencia al conductor encarece considerablemente el precio final de los vehículos, BYD ha encontrado la fórmula para ofrecer esta tecnología de forma masiva y económica. La clave está en la Inteligencia Artificial (IA), que permite abaratar costes sin sacrificar funcionalidades.

BYD no solo desarrolla su propia IA, sino que también colabora con startups como DeepSeek, una empresa china que compite con gigantes estadounidenses como OpenAI, creadora de ChatGPT. Esta alianza tecnológica permite a BYD integrar sistemas de conducción autónoma avanzados, que hasta ahora solo estaban disponibles en coches de alta gama, en vehículos accesibles para el público en general.

«El Ojo de Dios»: Tres Niveles para Todos los Bolsillos

El sistema «El Ojo de Dios» se presenta en tres niveles de sofisticación:

  • Nivel A: El más básico, equipado con 12 cámaras, radares y sensores de ultrasonido. Este nivel será estándar en coches económicos como el Seagull, permitiendo funciones como aparcar remotamente desde el móvil y adelantamientos autónomos en carretera.
  • Nivel B: Añade un sensor LiDAR y un software más avanzado para mejorar la percepción y precisión de los asistentes de conducción.
  • Nivel C: Reservado para la gama de lujo Yangwang de BYD, con tres sensores LiDAR y un software más potente para una experiencia de conducción autónoma superior.

Esta segmentación permite que la tecnología sea escalable, adaptándose a diferentes segmentos del mercado, lo que hace que la conducción autónoma deje de ser un lujo exclusivo.

Un Cambio de Paradigma en la Industria Automotriz

El fundador de BYD, Wang Chuanfu, ha declarado que la conducción autónoma debe ser tan común y esencial como el cinturón de seguridad o los airbags. Con más de 110.000 ingenieros en plantilla, de los cuales 5.000 se especializan en IA, BYD está apostando fuertemente por esta tecnología para consolidar su posición global.

Este enfoque representa un desafío directo para Tesla, que ha dominado el mercado de vehículos eléctricos con tecnologías avanzadas pero mantiene sus sistemas de conducción autónoma como un extra costoso. En cambio, BYD democratiza estas funciones, lo que podría cambiar el equilibrio del mercado mundial de la movilidad eléctrica.

La Importancia de la IA y la Competencia Global

La colaboración con DeepSeek es un ejemplo claro de la estrategia china para liderar no solo en electrificación, sino también en inteligencia artificial aplicada a la automoción. Mientras las empresas europeas y estadounidenses luchan por integrar IA en sus coches, China ya está implementando soluciones propias que abarcan desde el entretenimiento hasta la conducción autónoma completa.

Fabricantes chinos como Geely, Chery o Leapmotor también están trabajando en tecnologías similares, lo que refuerza la intención de China de romper la hegemonía estadounidense en el sector de la IA y la movilidad eléctrica.

¿Qué Significa Esto para Europa?

Aunque el Seagull de BYD llegará a Europa probablemente a un precio superior al de China, seguirá siendo un coche eléctrico con tecnología de conducción autónoma a un coste mucho más bajo que los modelos europeos equivalentes. Esto podría presionar a los fabricantes europeos a replantear sus estrategias de precios y tecnologías para no perder competitividad.

En definitiva, la apuesta de BYD con «El Ojo de Dios» representa una revolución en la industria automotriz. La tecnología de conducción autónoma ya no es un lujo exclusivo, sino una realidad accesible para todos, llevando la seguridad, la comodidad y la innovación tecnológica a un mayor número de personas. China no solo está fabricando coches eléctricos baratos, sino que está redefiniendo lo que puede ofrecer un coche eléctrico asequible en términos de tecnología avanzada.